El impacto del alto índice de inflación de marzo no tardó en reflejarse en las góndolas: las ventas en los supermercados, autoservicios y almacenes, en ese lapso, se desplomó 8,7% respecto del mismo período del año pasado. Y acumula una merma de 7,3% en lo que va del año.
Los datos, recabados por la consultora especializada Scentia muestran que la caída, no sólo es la mayor en lo que va del año sino también quees el mes que muestra la caída mas significativa desde el 2003.