El presidente del Banco Central, Alejandro Vanoli, reconoció que finalizó una etapa en donde el país se desendeudaba y comenzó otra nueva en donde llega crédito externo. “La etapa del desendeudamiento en la Argentina tocó un piso pero hay que tener en cuenta el peligro de depender del crédito externo”, indicó el funcionario durante el decimo Congreso del Consejo de Ciencias Económicas de la Ciudad de Buenos Aires. Vanoli además, en medio de las negociaciones paritarias y luego de que la semana pasada el Ministro de Economía Axel Kicillof anunció una reducción del impuesto a las ganancias, indicó que “es saludable que haya una discusión sobre los impuestos pero hay que hacerlo con lógica de que la política fiscal no puede ser del primer mundo con impuestos del cuarto mundo”. El funcionario también remarcó el cambio de política monetaria en los últimos meses y sostuvo que “hubo una decisión política de frenar la especulación y adecuar la coordinación y en un momento de octubre comenzaron a cambiar las cosas”. En este sentido confesó: “Tomo lo que la gente me dice y comentan: Ahora parece que hay equipo, ahora parece que sí el BCRA coordina la política cambiaria o del dólar”. El funcionario cerró el congreso junto al viceministro de Economía, Emanuel Álvarez Agis, que se retiró en medio de la conferencia y de manera sorpresiva. En un año electoral, Vanoli no pasó por alto este tema y subrayó que “el ajuste es malo, es muy difícil que alguien pueda progresar electoralmente si plantea opciones como esta” y agregó: “Recuerden cuando el presidente Carlos Menen dijo que si hubiera dicho lo que iba a hacer no me hubiese votado nadie. Hoy no está bien visto hablar sobre políticas de ajuste”. En esta línea indicó que “la Argentina está siendo un laboratorio de dos proyectos y hoy se está corriendo el discurso devaluador porque la gente comprendió que lo que se decía a fines del año pasado, no se cumplió”. Además, recordó que “se quiere instalar un banco central que sólo este preocupado por la inflación y no por otras cuestiones. Cuando asumí naturalmente el problema era el tema cambiario, por la brecha que había. Se buscó dar certidumbre y en estos meses logramos quebrar ese clima”. Por último sostuvo: “Yo me acuerdo cuando las tapas de los diarios hablaban de un dólar a $ 20 y las reservas en u$s 20.000 millones. Pudimos desarmar ese clima y dar mayor confianza. Además, esa posibilidad de mermar expectativas inflacionarias ayudan a transitar el 2015 con tranquilidad”.