La presidenta Cristina Fernández de Kirchner afirmó hoy que "cuando se anteponen cuestiones personales que nada tienen que ver con los intereses de los trabajadores pasan las cosas que pasan".

"Las cosas pasan cuando los empresarios o los sindicalistas creen que cuando dividen se crean mejores cosas", sostuvo la Presidenta al hablar en un acto en la Casa de Gobierno, en directa alusión al reclamo por la suba del mínimo no impnible de Ganancias que encabeza el líder de la CGT, Hugo Moyano.

La Presidenta aclaró también que "un 81% de los trabajadores en blanco no están alcanzados" por el impuesto a las Ganancias.

Sostuvo que ese impuesto “existe en todas partes del mundo” y que sólo afecta “al 19 por ciento” de los trabajadores, que se quedan “con el 41 por ciento” de la masa salarial.

La Presidenta, al referirse a una posible suba del mínimo no imponible, aseveró que “no podemos caer en otra inequidad” y apuntó que se trata de “un impuesto a los altos ingresos que existe en todas parte del mundo”.

Además, precisó que “de los 9.159.000 trabajadores” con que cuenta el país “el 19 por ciento paga impuestos a ganancias” por lo que “el 81 por ciento no llega al mínimo imponible”. Aclaró que se refería a los empleados ‘en blanco’.

En referencia al reclamo encabezado por Moyano, advirtió que “sería muy interesante comenzar a discutir esto de hacer socialismo con la plata de los demás… pero con la tuya convertirse en el liberal más acérrimo, sobre todo si te querés seguir llamando peronista…”

La jefa de Estado indicó que los trabajadores “están todos subsidiados en transporte, luz, agua, gas, combustible”.

Incluso precisó que en el caso de un empleado soltero, con un sueldo de 10 mil pesos, “el primer descuento es por los aportes personales, de jubilación, obra social, y la cuota sindical, que oscila entre el 1,5 y el 3 por ciento” lo que totaliza “el 17 por ciento”, y apuntó que “sobre el remanente recién se aplica a los altos ingresos, de 402 pesos”.

“Este bote que nos está salvando de la tormenta lo construímos nosotros, y los principales beneficiarios están tratando de pincharlo con la lógica del escorpión; no lo entiendo, salvo que haya más que cuestiones sindicales”, advirtió.