En el tramo final de la gestión presidencial de Cristina Kirchner, el oficialismo impulsa la sanción de un Código de Trabajo con el que se propone anular los efectos nocivos de la política de flexibilización laboral que se promulgó en la década del 90.
Con esa premisa, el diputado Héctor Recalde (Frente para la Victoria) y un grupo de abogados laboralistas trabajan en la conformación del Código que agruparía todas las leyes vigentes que regulan el empleo e incluiría profundos cambios que ampliarían algunos derechos de los trabajadores.
Los empresarios están inquietos porque trascendió que se avanzará en varios temas relevantes para la economía de las patronales como son la inclusión de los empleados en el reparto de utilidades, la extensión de licencias por embarazo y paternidad, el incremento de la indemnización mínima y la constitución de comités mixtos de seguridad e higiene dentro de las compañías.
La idea ya es analizada por el ministro de Trabajo, Carlos Tomada, e incluso hubo contactos con el secretario de Justicia, Julián Álvarez, y el secretario legal y técnico de la presidencia, Carlos Zannini.